Organización Agraria Araga
FEV pide no caer en “demagogia” con el debate sobre la liberalización de viñedos
El secretario general de la Federación Española del Vino (FEV), Pau Roca, ha reiterado la apuesta de esta patronal por la liberalización de viñedos y plantea que si la Comisión Europea reabre el debate para dar marcha atrás, también ellos exigirán revisar toda la Organización Común de Mercado (OCM). Así lo ha asegurado en declaraciones a Efeagro Roca, quien ha criticado la “demagogia” de quienes aseguran que acabar con los actuales derechos de plantación supondría un ataque a la cultura, la tradición viticultura o a su valor patrimonial, o una distorsión en el mercado entre oferta y demanda.
La Comisión Europea (CE) tiene previsto crear un Grupo de Alto Nivel para analizar las peticiones en favor de continuar con los “derechos de plantación” que actualmente restringen el cultivo de viñas.
Según la normativa actual, estos derechos de plantación se eliminarán en 2015 para dar paso a un sistema de liberalización de plantaciones, aunque las presiones de 13 países de la Unión, junto a organizaciones agrarias y sectoriales, han provocado que la Comisión esté dispuesta al menos a reabrir el debate.
En opinión de Roca, tampoco se necesita un sistema de derechos de plantación para dar seguridad a las denominaciones de origen, por ejemplo, sino más bien que se permitan herramientas de gestión a las Interprofesionales y a los consejos reguladores para organizarse en función de su potencial y necesidades de mercado.
También rebate que la liberalización sirva para que acudan multinacionales a plantar viñedos, un sector actualmente “muy atomizado”, según ha comentado.
Ha recordado al comisario de Agricultura europeo, Dacian Ciolos, que el acuerdo alcanzado en su momento era “no reabrir el melón de los derechos de plantación”, pero que, si lo hace, también el sector que representan volverá a replantear toda la OCM.
Y con ello, se abrirá también el debate sobre la chaptalización (adición de azúcar para aumentar el grado alcohólico del vino), ciertas prácticas enológicas o el reparto de fondos económicos.
Roca ha lamentado que el “equilibrio alcanzado” hasta ahora “se vea roto ahora” y pide al nuevo ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, que no secunde la posición a su juicio “imprudente” de su antecesora en el cargo, Rosa Aguilar, quien se sumó a los partidarios de mantener los derechos de plantación.
En su opinión, no hay por qué prohibir nuevas plantaciones para equilibrar oferta y demanda, si el sector tiene instrumentos de regulación y ordenación de su oferta.
Y ejemplifica con un símil: “no es necesario que Bruselas prohíba nuevas licencias de taxi si cada municipio decide cuántas pueden otorgarse según sus necesidades”.
Ha argumentado que, si se da marcha atrás en la liberalización, se coarta la necesaria adaptación al mercado del sector vitivinícola, que necesita elaborar vinos más competitivos frente a la presión creciente de la oferta de otras potencias como EEUU o Australia.
“Tenemos que abrir posibilidades de crecer en determinadas zonas si es necesario”, ha planteado.